La Unión Europea le ha sacado los colores al Ayuntamiento de Zaragoza en materia de calidad del aire que respiran sus ciudadanos. Según ha denunciado el colectivo Ecologistas en Acción, la UE, después de varios avisos, ha decidido abrir un expediente sancionador a la capital aragonesa por sobrepasar los niveles de contaminación permitidos en la legislación.
Dicha contaminación es por partículas de polvo en suspensión.
El Consistorio zaragozano presentó un recurso al expediente debido al “intrusismo” del polvo sahariano en las previsiones por lo que, y según el colectivo ecologista el expediente está en trámite y todavía la UE no ha dicho que va a hacer.
A nivel de calle, la avenida Navarra es el punto “negro” de la ciudad. El puesto de medición de la avenida Navarra registró en seis meses 83 momentos en el que el índice de contaminación por partículas superaba el máximo permitido (50 microgramos por metro cúbico de aire).
Además de de las partículas en suspensión (polvo microscópico), este punto de medición del barrio de Delicias también supera los índices de dióxido de nitrógeno, con 55 mediciones por encima del techo permitido.
Por otra parte, Barbé ha criticado que el Consistorio zaragozano no incluye algunos agentes contaminantes en sus mediciones, tal y como hacen otras ciudades. “En la ciudad de Zaragoza echamos de menos que se analicen las partículas de polvo más pequeñas (PM 2,5), también hay un contaminante que es el ozono troposférico. Según la legislación, aparte de medir los picos de contaminación hay que dar datos sobre bloques de ocho horas”.
Según los ecologistas, el Ayuntamiento de Zaragoza no ha llevado a cabo ningún plan ambicioso para conseguir bajar los niveles de polución en las calles de la capital.
Y eso que tenemos el cierzo.
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