Unas 7.000 personas han navegado por el Ebro en los barcos turísticos.
Una cifra bajísima si tenemos en cuenta que las previsiones iniciales eran de 350.000 y luego se bajaron a 20.000.
El año pasado no se superaron los 18.000 viajes y este año rondan los 7.000.
Esto no sería problema de no ser porque estamos hablando de un transporte subvencionado por el ayuntamiento y de que para ponerlo en marcha huvo que rebajar la solera del Puente de Piedra y dragar el Ebro.
Además a la empresa concesionaria hay que compensarle, desde el ayuntamiento, por las pérdidas del año pasado con 320.000 euros.
Haced cuentas para ver a cuanto nos sale el viaje.
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